DIAGONAL
TEXTO : TXENTE REKONDO (GAIN) / FOTOS : ERIC LAFFORGUE
Mujeres norcoreanas. La mujer de rosa lleva un hanbok, el vestido tradicional que se utiliza las ocasiones especiales. La mujer de oscuro lleva un traje moderno.
La República Popular Democrática de Corea (RPDC) está sometida a todo un abanico de clichés e ideas preconcebidas que distorsionan la rica y compleja realidad de ese Estado. Englobada en el llamado “eje del mal” instaurado por EE UU, señalada como amenaza nuclear para la región, al tiempo que nos presentan un régimen político que lleva a su pueblo casi a la exterminación, la RPDC presenta otros argumentos que echan por tierra esas afirmaciones. Este año se cumple el 60 aniversario de la creación de la RPDC, el 8 de septiembre de 1948 el fallecido presidente Kim Il Sung decidió dar ese paso. Hasta 1945 Corea era un país unificado, pero tras la ocupación japonesa durante la II Guerra Mundial y la división del país entre un norte apoyado por la Unión Soviética y un sur dirigido por Estados Unidos, la separación del país se materializó. Desde entonces la RPDC se ha guiado por la ideología formada en torno al pensamiento de Kim Il Sung, materializado en la “idea juche”, donde se señala que el dueño de la revolución y la construcción y fuerza que las impulsa son las masas populares. Al mismo tiempo se fundamenta otro pilar (la “política de songun”), que prioriza el aspecto militar en la “lucha revolucionaria”.
Uno de los aspectos básicos de la estrategia norcoreana es la búsqueda de una vía para reunificar el país. La propuesta de los dirigentes norcoreanos se asienta en construir un Estado unificado de carácter confederado, con una asamblea nacional en la que el número de representantes del norte y del sur será el mismo y en el que también tendrían cabida representantes de los coreanos en el extranjero.
Hambrunas
La hambruna que afectó a buena parte de la población en la década de los ‘90 vino motivada por la conjunción de diversos factores. La desaparición del espacio soviético, las sanciones y el embargo promovidos por Washington, estuvieron acompañados además por una sucesión de catástrofes naturales que llevaron al país a un período de dificultad. En la actualidad parece que se ha podido subsanar la situación y la diversificación de la producción económica parece dar sus primeros frutos. Algunos analistas sostienen que la RPDC podría ir hacia un modelo similar al chino, pero fuentes norcoreanas desmienten esas versiones, señalando que no hay previsto ningún cambio estratégico.
En este escenario entra el llamado “conflicto nuclear”, una excusa utilizada por EE UU para proseguir sus campañas de aislamiento contra la RPDC. Sin embargo, el uso que ésta da a la energía nuclear debe entenderse como una poderosa arma de cara a una negociación bilateral con EE UU, y una baza para conseguir las contrapartidas que desde hace tiempo demandan los dirigentes norcoreanos, como la firma de un compromiso de no agresión.
Hoy por hoy es posible viajar al país por medio de viajes en grupo organizados por la Compañía de Viaje Internacional Coreana, o bien por medio de una delegación invitada. Ésta es una experiencia que nos permite descubrir la otra cara del norte de Corea.
Una realidad donde los actos culturales, como los ‘juegos de masas’, que reúnen a decenas de miles de personas en torno a la danza, la gimnasia y otros espectáculos, tienen una importante presencia. O visitar los monumentos históricos restaurados por el Gobierno, e incluso disponer de alguna oportunidad para descubrir la naturaleza salvaje que podemos encontrar tanto en el sur como en el norte de la península coreana. Y sobre todo tener la ocasión de constatar por sí mismo la verdadera realidad que se esconde detrás de esa telaraña de noticias interesadas y alejadas del quehacer diario de aquel país.
TEXTO : TXENTE REKONDO (GAIN) / FOTOS : ERIC LAFFORGUE
Mujeres norcoreanas. La mujer de rosa lleva un hanbok, el vestido tradicional que se utiliza las ocasiones especiales. La mujer de oscuro lleva un traje moderno.
La República Popular Democrática de Corea (RPDC) está sometida a todo un abanico de clichés e ideas preconcebidas que distorsionan la rica y compleja realidad de ese Estado. Englobada en el llamado “eje del mal” instaurado por EE UU, señalada como amenaza nuclear para la región, al tiempo que nos presentan un régimen político que lleva a su pueblo casi a la exterminación, la RPDC presenta otros argumentos que echan por tierra esas afirmaciones. Este año se cumple el 60 aniversario de la creación de la RPDC, el 8 de septiembre de 1948 el fallecido presidente Kim Il Sung decidió dar ese paso. Hasta 1945 Corea era un país unificado, pero tras la ocupación japonesa durante la II Guerra Mundial y la división del país entre un norte apoyado por la Unión Soviética y un sur dirigido por Estados Unidos, la separación del país se materializó. Desde entonces la RPDC se ha guiado por la ideología formada en torno al pensamiento de Kim Il Sung, materializado en la “idea juche”, donde se señala que el dueño de la revolución y la construcción y fuerza que las impulsa son las masas populares. Al mismo tiempo se fundamenta otro pilar (la “política de songun”), que prioriza el aspecto militar en la “lucha revolucionaria”.
Uno de los aspectos básicos de la estrategia norcoreana es la búsqueda de una vía para reunificar el país. La propuesta de los dirigentes norcoreanos se asienta en construir un Estado unificado de carácter confederado, con una asamblea nacional en la que el número de representantes del norte y del sur será el mismo y en el que también tendrían cabida representantes de los coreanos en el extranjero.
Hambrunas
La hambruna que afectó a buena parte de la población en la década de los ‘90 vino motivada por la conjunción de diversos factores. La desaparición del espacio soviético, las sanciones y el embargo promovidos por Washington, estuvieron acompañados además por una sucesión de catástrofes naturales que llevaron al país a un período de dificultad. En la actualidad parece que se ha podido subsanar la situación y la diversificación de la producción económica parece dar sus primeros frutos. Algunos analistas sostienen que la RPDC podría ir hacia un modelo similar al chino, pero fuentes norcoreanas desmienten esas versiones, señalando que no hay previsto ningún cambio estratégico.
En este escenario entra el llamado “conflicto nuclear”, una excusa utilizada por EE UU para proseguir sus campañas de aislamiento contra la RPDC. Sin embargo, el uso que ésta da a la energía nuclear debe entenderse como una poderosa arma de cara a una negociación bilateral con EE UU, y una baza para conseguir las contrapartidas que desde hace tiempo demandan los dirigentes norcoreanos, como la firma de un compromiso de no agresión.
Hoy por hoy es posible viajar al país por medio de viajes en grupo organizados por la Compañía de Viaje Internacional Coreana, o bien por medio de una delegación invitada. Ésta es una experiencia que nos permite descubrir la otra cara del norte de Corea.
Una realidad donde los actos culturales, como los ‘juegos de masas’, que reúnen a decenas de miles de personas en torno a la danza, la gimnasia y otros espectáculos, tienen una importante presencia. O visitar los monumentos históricos restaurados por el Gobierno, e incluso disponer de alguna oportunidad para descubrir la naturaleza salvaje que podemos encontrar tanto en el sur como en el norte de la península coreana. Y sobre todo tener la ocasión de constatar por sí mismo la verdadera realidad que se esconde detrás de esa telaraña de noticias interesadas y alejadas del quehacer diario de aquel país.
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