Recientemente se han hecho tristemente famosas las tarjetas opacas de Bankia. El dinero que se derrochaba con ellas se imputaba a errores informáticos. El MEySS no ha querido ser menos que esa “emprendedora” entidad, pero, además, ha querido hacerlo a lo grande: aquí el error se le imputa directamente a toda la informática pública y a este derroche lo llaman Desarrollo Gestionado (DG).
El Ministerio afirma que el DG supone una mejora en todos los sentidos. Gracias a las preguntas parlamentarias que los trabajadores de la GISS hicieron llegar a Izquierda Plural ahora sabemos que para el Gobierno estas mejoras van a consistir en: mayores descuentos, minimizar la cesión ilegal de trabajadores ymejorar la eficiencia. Nosotros no tenemos ningún motivo para desconfiar de estas afirmaciones gubernamentales, pero hay una serie de cuestiones que no acabamos de entender y queremos analizarlas.
Según el nuevo modelo, una de las pocas funciones “de alto valor añadido” que nos van a quedar a los empleados públicos va a ser la relacionada con la Aceptación y Pruebas de las Aplicaciones. En Teoría de Sistemas se denomina caja negra a aquel elemento que es estudiado desde el punto de vista de las entradas que recibe y las salidas o respuestas que produce, sin tener en cuenta su funcionamiento interno. Como buenos informáticos que somos vamos practicar con unas Pruebas de Tarjeta Negra, perdón, queríamos decir de Caja Negra aplicadas al DG.
Mayores descuentos. Todos los lotes licitados excepto el relativo al Exp. 7202/14G se están adjudicando por el precio máximo de licitación. El presupuesto de contratos informáticos de la GISS ha pasado de 55´7 millones con el sistema de Asistencia Técnica (AT) a 60’76 millones este año que entra en vigor el Desarrollo Gestionado (DG) y 74’63 es la previsión para el año que viene, cabe destacar que dentro de este grupo el presupuesto del programa Desarrollo de Aplicaciones de la Seguridad Social pasa de 22’59 millones a 49’56 millones para el año que viene. Como este sistema se está implantando también con presupuestos de toda la Seguridad Social, el total destinado para Servicios de Carácter Informático de la Seguridad Social ha pasado de 89’9 este año a 169’4 millones para el 2015.
Se minimiza la cesión ilegal de trabajadores. En el Juego de Tronos que ha supuesto ganar los distintos lotes, las empresas han pujado a la baja por los precios de la hora de trabajo, esta diferencia lógicamente la asumirán los trabajadores de empresas externas disminuyendo su salario, aumentando la subcontratación y su precariedad, por lo que no solo se mantiene el ilícito de la cesión ilegal, sino que éste se incrementará entre estas empresas.
Se mejora la eficiencia. La experiencia en los Centros donde se está aplicando este modelo muestra que las empresas inflan artificialmente las Unidades de Trabajo necesarias para el desarrollo de los distintos trabajos. Tampoco parece que mejore la eficiencia el regalar proyectos íntegramente desarrollados por la GISS en los que, paradójicamente, los empleados públicos se convertirán en asistencia técnica de la Asistencia Técnica al regalarles horas públicas a estas empresas.
Como muestran estas Pruebas de Tarjeta Negra, perdón, queríamos decir Pruebas de Caja Negra este sistema no funciona y, siguiendo diligentemente la metodología del Desarrollo Gestionado, tenemos que devolverlo a origen. La única manera que tenemos los empleados públicos de devolverlo es organizándonos y luchando por defender lo nuestro, que es lo público. No hay otro camino.
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