Este fin de semana he andado perdido por las tierras de Ssspaña, concretamente en Hoyos del Espino (Avila) visitando a mis hijos que están de campamento por la zona. En este pintoresco rincón hay afincados 15 campamentos de todo tipo de organización o colectivos, tenemos desde Exploradores (Scout) de Madrid, Ciudad Real, pasando por Scout Católicos y OJE, hasta otras de colegios o asociaciones. Campamentos estos que no tienen nada que ver en los que había antes (por el 79) por su magnificas instalaciones hoy convertidas en camping para caravaning. Me he dado cuenta en estos treinta años transcurridos que hay mucho mas arboles y todo mas frondoso que antes, no se si debido a que realmente se ha invertido en esta zona dinero para su conservación o que nos hemos vuelto mucho mas cuidadosos con esto del medio ambiente o pueden ser ambas.
Tocaba el día de padres, que es un fin de semana en el ecuador de campamento en el que lo pasamos con los hijos que están en este lugar, y ha coincidió con el macro concierto organizado por la Junta de Castilla y León en el que tocaban Miguel Ríos, Ana Belén y otros mas. Ustedes se puede imaginar un pueblo de 500 habitantes donde ese día lo visitan, no solo todos los familiares de los niños que están de campamento si no, 10000 personas que van al concierto. Caos absoluto. Carreteras cortadas que casi nos impedían ver a los niños, los pocos bares llenos a reventar, etc. Saben que la zona de Gredos es parque nacional por lo tanto es zona protegida, pues bien a los lumbreras de la Junta, para dinamizar la misma se les ocurren estas cosas, en medio del bosque organizar este concierto con el peligro que conlleva esto de incendio forestal y lo difícil de la evacuación en caso de este desastre. Así están los ecologistas (con razón) cabreaos con este tema. Por lo menos año a año se van consiguiendo cosas a nivel ambiental por la presión de estos grupos. Hablando con los lugareños, no estaban de acuerdo con esto que se les imponía (ni tampoco con la desaparición de las maravillosas instalaciones campamentales).
Hice noche en Barco de Ávila, un pueblo precioso al lado del Río Tormes, al cual les invito a que visiten y compren sus famosas judías blancas o su chocolate. Gente acogedora y simpática, raro en ciertas zonas de la provincia de Ávila, deseosa de entablar conversación con los visitantes.
Fin de semana intenso y lunes agotador, es lo que pasa con estas cosas…
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