El INSS es incapaz de desarrollar sus funciones
Mantenemos una Administración llena de altos cargos y flaca en el resto de su estructura.. Es vergonzosa la desaparición permanente y definitiva de la parte media- baja de la plantilla, efectuada de forma premeditada para culminar y justificar la privatización de las funciones públicas.
Las políticas de continuos recortes de personal nos llevan a una situación insostenible: La Dirección Provincial del INSS en Madrid, es incapaz de desarrollar sus funciones, por falta de personal. La idea "genial" de nuestros jerarcas es desviar al resto de las provincias los expedientes que no se pueden resolver allí.
Sabemos que en algunas provincias se han pagado 6 euros por expediente tramitado, incluso se ha presionado al personal para que aceptara esta componenda. Comprendemos la situación de necesidad económica de una plantilla “a la que le robaron y siguen robando sus salarios”. Pero no podemos entender "el espíritu de colaboración" de parte del personal que ha aceptado unas propinas que no solucionan el problema de fondo y además lo acrecientan.
La Administración ahora, ante la "falta de personal voluntario" ha optado por sacar el látigo y distribuir los expedientes por todas las provincias. No se ha planteado, o querido plantear, que el resto de las provincias también sufren el mismo o similar problema. La falta de personal es general.
¿Dónde está esa "histórica" oferta de empleo público de la que tanto presumieron el gobierno y los sindicatos de las mesas "amigas"? ¿Dónde el personal interino que iba a aliviar la evidente falta de personal que nos acucia?
La solución es evidente y urgente, convocatoria inmediata de una oferta de empleo público que cubra todas las plazas que se han amortizado en los últimos 10 años.
Lo demás son parches, apaños y negocios para justificar, pretéritas, presentes y futuras privatizaciones. De hecho, de nuevo se quiere contar con TRAGSA, para encargarse de solucionar las incidencias de la Incapacidad Temporal que ahora se resuelven mediante los buzones Acredita y Subsidios, con el agravante de que en las transacciones necesarias para solucionar estas incidencias existen datos sensibles (por ejemplo, diagnósticos médicos). La protección de datos, cuando conviene, se relaja o desaparece.
No olvidamos los nefastos precedentes de esta empresa, en el FOGASA, dónde sus chapuzas debieron ser solucionadas posteriormente por el personal del FOGASA.
Ni la imposición de la administración electrónica, ni una privatización que hace negocio con nuestros derechos, han servido para mantener una Administración eficaz y de calidad, la solución pasa por dotar a esta de una plantilla suficiente y permanentemente renovable.
CGT-CAT, va a denunciar pública y políticamente esta situación. Pero es necesaria la concienciación de la plantilla ante el futuro que nos espera y una movilización que frene este nuevo atropello.
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